01 / 09 / 2025
Pablo Álvarez – CIPER
“Es evidente entonces que las protestas no son por razones humanitarias, más bien se explican por el descontento con el gobierno. Este descontento con el gobierno también se explica históricamente: Netanyahu no es un político tan popular como uno podría pensar dado el hecho de que es el primer ministro que más tiempo ha permanecido en el poder. Esta estadía prolongada en el poder se explica por una atomización del sistema de partidos y el crecimiento de formaciones de extrema derecha. “Bibi” ha sido el único capaz de formar coaliciones de gobierno con esas formaciones partidistas.
Antes de la guerra en Gaza ya habían estallado protestas multitudinarias en contra del gobierno, en esa ocasión por el proyecto de ley que le habría dado un enorme poder sobre la Corte Suprema. También han estallado protestas por la exención militar de los jaredíes (judíos ortodoxos), en un país donde hombres y mujeres deben cumplir con un estricto servicio militar. Es decir, el descontento social con el gobierno de “Bibi” Netanyahu es antiguo, la guerra eterna en Gaza lo está trayendo de vuelta.
Lo que no es de esperar es que se reproduzcan en Israel las protestas en contra de la guerra en Gaza que se han visto en innumerables países del mundo, porque la población israelí no está tan dividida en torno a ese tema. Si bien hay quienes han manifestado una voz disidente y han protestado en contra de los crímenes israelíes, siguen siendo un grupo minoritario”.